La mascarilla para el pelo es un producto elaborado con ingredientes nutritivos para reparar cabellos secos, dañados o con las puntas abiertas.

Hidratar tu pelo con una buena mascarilla debe ser un ritual dentro de tu rutina de lavado. Junto al champú y el acondicionador, este cosmético se ha convertido en un imprescindible para el cabello

Por eso en toda rutina de limpieza del cabello no puede faltar. Al igual que el champú lava el cabello, lo limpia de impurezas y le aporta una ligera hidratación o nutrición.El acondicionador profundizará el tratamiento específico en cuestión, suavizará el cabello y facilitará el desenredado. La mascarilla gracias a sus activos reparadores y nutritivos, trata en profundidad problemas específicos del cabello, siendo ideal para complementar esta rutina.

Beneficios de la mascarilla para el cabello

Sea cual sea tu tipo de pelo (seco, graso, encrespado, con o sin volumen), la mascarilla te ayudará a lucir una melena sana y fuerte y la protegerá de los daños causados al teñirla o por los efectos del sol.

El estado del cabello  depende de la frecuencia de lavado, aplicación de productos químicos y agresiones térmicas. Por eso es importante elegir la mascarilla adecuada para nutrir tu cabello desde el interior, y que luzca bonito y sano.

las mascarillas están diseñadas para proporcionar una hidratación intensiva a los cabellos secos. Entre sus beneficios, una mascarilla te reforzará el riego capilar evitando su caída y te aportará brillo, suavidad y volumen. Otras están formuladas para acabar y prevenir el encrespamiento que tan molesto resulta.

Tipos de mascarillas para el pelo

Mascarilla hidratante

Suaviza el cabello y evita que se seque por la acción de las herramientas de calor, los productos de fijación y las coloraciones. Es especialmente necesaria cuando nuestro pelo ha quedado muy castigado tras el verano o llevamos algún tratamiento de decoloración que requiera un cuidado extra de la melena. Existen mascarillas para cada tipo de cabello: rizado, con encrespamiento, raíces, grasas, cabellos teñidos, etc.

Lo ideal es aplicarla de medios a puntas tras aclarar el champú y dejar que actúe unos minutos, para al final aclarar con agua tibia procurando que las puntas queden ligeramente impregnadas.

Mascarilla nutritiva para cabello seco o muy seco

Indicada para el cabello seco o muy seco que necesita más hidratación y nutrición. Las propiedades nutritivas y protectoras de este tipo de mascarilla son ideales para este problema capilar. Suelen tener una textura cremosa y untuosa, que nutre y suaviza profundamente la cutícula del cabello.

Mascarilla protectora del color

Ideal para el cuidado del cabello teñido o con mechas. Alargan la duración del color y el brillo,y evitan la decoloración prematura del cabello. Son ideales para combinar con champús protectores del color.

Mascarilla reparadora

Ideal para el cabello dañado, mejora su condición y apariencia. Contiene ingredientes activos anti-rotura. Su formulación nutre, regenera y suaviza el pelo, y la cutícula queda sellada y suave.

Modo de aplicación de la mascarilla capilar

La mascarilla capilar una vez o dos veces a la semana. El importante tener claro cuál es la mascarilla adecuada para nuestro tipo y necesidad concreta de ese cabello en ese  momento (falta de brillo, densidad, encrespamiento o falta de volumen) 

Durante la ducha o baño, siguiendo tu rutina de cabello habitual (champú + acondicionador), aplicar una pequeña cantidad de mascarilla con los dedos en el cabello escurrido, comenzando desde la altura de las orejas para evitar engrasar las raíces (esta última ya está bien provista de sebo).

Masajear delicadamente para cubrir cuidadosamente todas las hebras del cabello. Deja actuar durante 3 a 5 minutos y luego enjuagar hasta que el producto esté bien eliminado. Es importante asegurarse de aclarar bien el cabello para evitar apelmazarlo con restos de producto que lo dejarían efecto pegajoso y aceitoso.